domingo, 7 de noviembre de 2010
En la distancia es fácil idealizar los rostros, recordar olores mucho más nítidos de cómo eran en realidad. En la distancia el viento nunca corta los labios, sino que levanta el pelo en blando movimiento. En la distancia el frío es una taza de leche caliente, una conversación a las 8 de la mañana, cuando nadie ha llegado. En la distancia, las fiestas son eternas, perfectas, con gente que siempre sigue bailando. En la distancia, los rizos son siempre elásticos, y el rubio es el oro más puro. El problema de la distancia es cuando esta desaparece, y la vida se vuelve realidad. Entonces, los puntos negros rompen el maquillaje, y los pañales huelen a mierda, y no a aloe vera. Pero esto es lo realmente maravilloso, cuando las cosas son distintas a como las recuerdas, pero ves que debajo el sentimiento es el mismo; cuando las paredes han sido pintadas de otro color, pero todavía se ven los nombres y las fechas grabados debajo. Cuando los amigos, la familia, el hogar, el trabajo, todo sigue su camino, todo sigue cambiando detrás de ti, pero siempre tienen un lugar para ti. Y mejor de lo que habías imaginado, por muy difícil que pudiera parecer. El calor de un abrazo es algo que nunca puede imitarse en un sueño.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 burradas:
Sí, coño, esto sí.
Enorme.
Mejor que si me hubieras llamado con la canción. Más próximamente en mi blog.
El placer de la vuelta a casa =D
vuelve pronto para más abrazos :)
Grande Santi...
Hay una cena en camino... you know
Publicar un comentario