viernes, 19 de febrero de 2010
Quiero ser bandido y traidor, quiero que los niños se duerman con el miedo a encontrarme. Quiero que las cicatrices crucen mi cara, quiero que mi respiración se confunda con la niebla en un callejón oscuro. Quiero hacer daño, quiero cosechar lágrimas y suspiros. Quiero escupir, golpear, para que piensen que hay un alma sensible en mi gruesa piel. Quiero reírme de defectos, fumar en baños y despachos, robar móviles de taquillas y que todo eso provoque una risilla de complicidad, de aceptación. No quiero poner una tirita en cada rodilla pelada, quiero que alguien sople en mi dedo quemado. No quiero dormirme rezando para que alguien sonría mientras miles de personas arden en la hoguera por no haberse comprometido con la vida. No quiero querer, pero siempre acabo queriendo que alguien me quiera.
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4 burradas:
Suerte con una empresa imposible. Es genial.
Un abrazo.
Genio.
Me siento identificado con la última frase.
Gory
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